Aeronáutica Civil abre proceso disciplinario por joven que operó 43 vuelos en El Dorado sin licencia

La Aeronáutica Civil inició un proceso disciplinario contra cinco de sus funcionarios luego de confirmar que un joven de 18 años, sin licencia ni formación técnica, operó comunicaciones de tránsito aéreo y dio instrucciones a 43 vuelos desde la torre de control del aeropuerto El Dorado en Bogotá. El episodio ocurrió el 21 de julio de 2025 y estuvo durante semanas rodeado de información incompleta, hasta que un documento interno reveló la magnitud del incidente.

El análisis disciplinario clasificó la situación como una violación grave de la normativa aeronáutica y un riesgo crítico para la seguridad operacional en una de las terminales aéreas más transitadas de Latinoamérica. Según la entidad, el joven permaneció durante 84 minutos en la frecuencia de control, interactuando directamente con pilotos de vuelos comerciales sin contar con ningún tipo de autorización.

La investigación determinó que el ingreso de Juan Diego Chavarro —hijo del controlador aéreo Carlos Andrés Chavarro— fue facilitado por tres controladores: Antonio Díaz, Mauricio Ferrer y el propio Chavarro padre. La Aerocivil consideró que los funcionarios vulneraron los protocolos más estrictos del sistema aeronáutico al permitirle manipular equipos y coordinar operaciones reservadas exclusivamente para personal certificado.

Otros dos funcionarios enfrentan cargos por no reportar el hecho, pese a estar obligados por norma a informar cualquier irregularidad en las áreas de alta seguridad.

Los registros internos muestran que el joven autorizó cambios de frecuencia, rodajes, aterrizajes y despegues de vuelos como el 4131 de Latam, el 4807 de Avianca y el 217 de Avianca, este último con trayecto hacia Buenos Aires. El caso se hizo público cuando Chavarro difundió en redes sociales un video desde la torre de control, donde se escuchan sus instrucciones en tiempo real.

Antes de conocerse el documento completo, se creía que solo tres vuelos habían sido afectados. Sin embargo, el recuento actualizado confirmó un total de 43 aeronaves involucradas.

La Aerocivil también señaló que existían rumores sobre presentas incursiones previas del joven en otras torres, aunque no se halló evidencia adicional. Las cámaras de seguridad registraron su recorrido por la instalación, su interacción con los equipos de comunicaciones y el momento en que asumió funciones propias del personal operativo.

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Tras conocerse el incidente, Díaz, Ferrer y Carlos Chavarro fueron suspendidos desde el 28 de julio, medida que se prorrogó tres meses mientras avanzaba la indagación. La entidad trasladó ahora el expediente a la etapa de juzgamiento, con acompañamiento de la Procuraduría, que verificó la legalidad del proceso.

En el caso del controlador Carlos Andrés Chavarro, la Aerocivil calificó su conducta como “gravísima”, al considerar que permitió deliberadamente que su hijo actuara como encargado de turno, aun sabiendo que no cumplía ningún requisito técnico ni legal.

La autoridad aérea reiteró que adoptará medidas correctivas y nuevas garantías de control para impedir que hechos de este tipo se repitan. En su pronunciamiento aseguró que reforzará los protocolos de acceso y supervisión en las zonas restringidas, con el fin de preservar la confiabilidad del servicio de navegación aérea en Colombia.

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