Petro propone a la Fiscalía visitar cárcel de Itagüí para avanzar en proceso de paz con bandas criminales

Durante un evento realizado este sábado en La Alpujarra, Medellín, el presidente Gustavo Petro propuso a la Fiscalía General de la Nación realizar una visita conjunta a la cárcel de Itagüí para evaluar posibles beneficios jurídicos a cabecillas de estructuras criminales que se acojan a un proceso de paz definitivo. La iniciativa hace parte de su estrategia de paz urbana en el Valle de Aburrá, en la que nueve líderes de organizaciones armadas participaron públicamente en el acto.

En su intervención, Petro señaló que el objetivo es alcanzar un acuerdo verificable y duradero que implique la dejación total de armas, el cese de extorsiones y el fin del reclutamiento de jóvenes en los barrios populares. El mandatario fue enfático en que este proceso no debe replicar errores del pasado. “No quiero que usen la paz para fortalecerse”, afirmó, insistiendo en que el Gobierno buscará garantías de cumplimiento reales.

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El acto reunió a altos funcionarios del Ejecutivo, delegados del proceso de paz, y a los líderes de bandas como “Carlos Pesebre”, “Tom” y “Vallejo”. Estos últimos leyeron un comunicado en el que reiteraron su voluntad de acogerse a la legalidad, y solicitaron un marco jurídico que permita avanzar en un enfoque restaurativo y de reintegración territorial. Según el presidente, el Gobierno analizará estas peticiones a la luz del ordenamiento legal vigente.

Petro también anunció la creación de 2.000 cupos para programas de arte y formación para niños y adolescentes en zonas vulnerables de Medellín, como parte de una política pública orientada a romper ciclos de violencia. La iniciativa fue respaldada por la senadora Isabel Zuleta, quien calificó el proyecto como un “piloto de paz para la niñez” y aseguró que será implementado junto con el ICBF.

La presencia de cabecillas criminales generó críticas desde sectores políticos. El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, calificó el acto como una amenaza directa a su seguridad y cuestionó la legitimidad del evento. Por su parte, el partido Centro Democrático denunció presiones en algunos barrios para garantizar asistencia al acto, y pidió a las autoridades investigar posibles casos de constreñimiento.

Además del tema de paz urbana, el presidente Petro abordó otras propuestas como la reforma laboral, la pensional y una eventual constituyente. Su visita a Medellín, según analistas políticos, también se enmarca en un esfuerzo por fortalecer su base electoral de cara a las elecciones de 2026. En la tarima lo acompañaron varios ministros y el exalcalde Daniel Quintero.

El proceso de paz urbana en Medellín, que ya completa dos años, sigue enfrentando desafíos relacionados con la verificación, la implementación jurídica y la seguridad en los territorios. La propuesta del presidente de involucrar a la Fiscalía busca destrabar la ruta institucional para avanzar en los compromisos anunciados por los voceros de las estructuras criminales.

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