Disturbios en la final de la Copa BetPlay dejan 59 heridos en Medellín

La celebración del octavo título de Atlético Nacional en la Copa BetPlay terminó opacada por graves hechos de violencia registrados en el estadio Atanasio Girardot, luego del partido ante el Deportivo Independiente Medellín.

Tras el pitazo final, en la tribuna norte del escenario deportivo se presentaron disturbios protagonizados por seguidores del DIM, quienes derribaron vallas, se enfrentaron con hinchas del equipo rival y lanzaron objetos hacia el terreno de juego. La situación obligó a suspender la ceremonia de premiación y a trasladar a los jugadores del conjunto verdolaga a los camerinos por razones de seguridad.

El personal de logística y unidades de la UNDMO intervinieron para controlar los desórdenes, que se extendieron tanto dentro como en los alrededores del estadio. Los incidentes también impactaron la operación de varias estaciones del metro de Medellín, generando afectaciones en la movilidad de la ciudad.

El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, rechazó los hechos y los calificó como criminales. Aseguró que las personas responsables de los desmanes serán identificadas y deberán responder ante la justicia.

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Las autoridades reportaron un balance de 59 personas heridas, entre ellas siete integrantes de la Policía, según confirmó el comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, general William Castaño. En el operativo participaron más de 1.100 uniformados.

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad de Medellín, al estadio ingresaron cerca de 43.000 hinchas y durante los controles se incautaron bengalas, bazucas con más de 300 disparos, más de 20 cajas de pólvora tipo torta y otros elementos prohibidos.

Los hechos reabren el debate sobre la seguridad en los estadios del país y las medidas necesarias para evitar que la violencia vuelva a empañar el fútbol colombiano.

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