Persisten bloqueos en la vía Cúcuta a El Zulia por parte de volqueteros y carboneros en medio de protestas

Desde la mañana de este domingo, la vía que conecta al municipio de Cúcuta con la localidad de Sardinata, en Norte de Santander, ha sido escenario de manifestaciones por parte de trabajadores vinculados al sector del transporte de carga y de carbón.

Los puntos críticos de la protesta se sitúan principalmente en el kilómetro 63, sector de Urimaco, donde al menos cincuenta personas han instalado un bloqueo vial que, en su primera etapa, permitía el paso intermitente de vehículos, pero que desde la madrugada del lunes 2 de junio mantiene paralizado todo tipo de tránsito en esa zona.

La movilización está integrada por conductores de volquetas y operarios del transporte de carbón, quienes expresan inconformidad frente a diversos aspectos relacionados con su actividad laboral, entre ellos la regulación ambiental, el estado de las vías terciarias, la falta de garantías operativas para la movilización del mineral y las condiciones económicas derivadas de restricciones en el transporte regional.

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El bloqueo en Urimaco no fue el único registrado en esta jornada. Durante el lunes festivo, se sumaron dos puntos adicionales de cierre en vías estratégicas del departamento.

El primero se localizó en el tramo que va desde la intersección conocida como la ‘Y’ de Astilleros hasta la zona de Pedregales. En este punto se estableció un cierre total de la vía, sin autorización de paso para ningún tipo de vehículo.

El segundo punto afectado fue la vereda La Alejandra, en jurisdicción del municipio de El Zulia, donde se permitió un paso intermitente, pero con importantes limitaciones que han generado congestión vehicular, extensos tiempos de espera y complicaciones para el desplazamiento hacia la zona rural del área metropolitana.

Material audiovisual tomado en los diferentes sectores muestra escenas de quema de llantas, acumulación de madera, ramas y escombros sobre el pavimento, así como la presencia de motocicletas, maquinaria pesada y vehículos de carga estacionados en la mitad de la carretera.

Las imágenes reflejan un ambiente de tensión sostenida en el que los manifestantes continúan apostados sobre la vía en espera de respuestas institucionales a sus exigencias.

Frente a esta situación, unidades adscritas a la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional en Norte de Santander se desplazaron a los lugares de concentración.

Los uniformados adelantan labores de acompañamiento y vigilancia, al tiempo que buscan establecer canales de diálogo entre los organizadores de la protesta y los voceros de la administración departamental, con el fin de contener el impacto de los bloqueos sobre la movilidad y las actividades productivas de la región.

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