Netanyahu respalda ataque de Trump contra Irán y afirma que “la paz se logra con la fuerza”

La reciente ofensiva militar ejecutada por Estados Unidos contra objetivos nucleares en territorio iraní recibió el respaldo público del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien reconoció al presidente Donald Trump por la orden de ataque y subrayó su alineación estratégica con Washington en el actual escenario de tensión regional.

En una declaración emitida mediante sus canales oficiales, Netanyahu manifestó su apoyo a la decisión del gobierno estadounidense de ejecutar bombardeos dirigidos contra tres complejos nucleares iraníes.

El jefe del Ejecutivo israelí afirmó que la operación representa, en su concepto, un giro en la política de disuasión frente a Irán, al considerar que la fuerza es un componente esencial para la consolidación de escenarios de paz. En sus palabras: “Trump y yo sostenemos desde hace años que primero viene la fuerza, luego la paz”.

El pronunciamiento fue acompañado de un video divulgado por el mismo Netanyahu, en el cual expone que los ataques realizados por Estados Unidos representan una acción que, según él, marcará un precedente histórico. Añadió que la determinación del presidente estadounidense “modificará para siempre el curso de la historia”.

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De acuerdo con información oficial, el operativo militar se concentró en las instalaciones de Fordó, Natanz e Isfahán, tres centros neurálgicos del programa nuclear iraní.

Según el mandatario estadounidense, los ataques habrían cumplido con los objetivos definidos por la inteligencia de defensa, provocando, según sus palabras, la destrucción completa de la infraestructura utilizada para el enriquecimiento de uranio.

La operación se enmarca en el conflicto en curso entre Irán e Israel, que ha escalado en las últimas semanas, y ante el cual Washington había mantenido hasta ahora una postura de evaluación estratégica.

La intervención de Estados Unidos, sin embargo, significó la ejecución directa de bombardeos sobre territorio iraní, acción que se materializó tras el despliegue previo de componentes militares estadounidenses en la región, entre ellos portaaviones y escuadrones de bombarderos.

El presidente Trump ofreció una alocución desde la Casa Blanca el sábado por la noche, acompañado por el vicepresidente J.D. Vance, el secretario de Estado Marco Rubio y el secretario de Defensa Pete Hegseth.

En su intervención, el mandatario aseguró que la acción militar fue ejecutada con éxito y reiteró que el objetivo principal es limitar las capacidades de Irán en materia de armamento nuclear.

Advirtió que, de no obtenerse una respuesta positiva por parte del gobierno iraní, Estados Unidos estaría dispuesto a ejecutar nuevos ataques contra otros objetivos identificados como prioritarios.

“Dimos a Irán la opción de elegir entre la paz o una tragedia mayor”, afirmó Trump. Añadió que, en caso de persistir una actitud hostil por parte del régimen de Teherán, la ofensiva continuará y se ampliará a nuevos puntos estratégicos del país, los cuales, en palabras del presidente, pueden ser “eliminados en minutos”.

Por su parte, Netanyahu destacó también la participación de las Fuerzas Armadas israelíes en la denominada “Operación León Naciente”, una acción militar previa contra posiciones iraníes, y aseguró que Estados Unidos, mediante la ofensiva del sábado, ejecutó un procedimiento que ningún otro país habría podido realizar con la misma precisión.

El líder israelí sostuvo que el ataque norteamericano será recordado como un hecho determinante para enfrentar lo que calificó como “el régimen más peligroso del mundo”.

También manifestó que el liderazgo de Trump, a su juicio, permitirá avanzar hacia un nuevo esquema de estabilidad en Oriente Medio.

La instalación de Fordó, uno de los blancos principales de los bombardeos, se encuentra aproximadamente a 100 kilómetros de Teherán y ha sido identificada por la comunidad internacional como uno de los centros más avanzados del desarrollo nuclear iraní.

Las otras dos instalaciones, Natanz e Isfahán, también han sido objeto de seguimiento por parte de organismos multilaterales, debido a sus capacidades de producción y almacenamiento de material nuclear.

Está previsto que el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, comparezca públicamente este domingo desde el Pentágono para ofrecer detalles adicionales sobre la ejecución de la ofensiva, el balance técnico de los resultados obtenidos y los siguientes pasos contemplados por el alto mando militar estadounidense.

Hasta el momento, el gobierno iraní no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre los ataques ni ha confirmado los daños reportados por Washington. Tampoco se conoce si se han producido bajas humanas en las áreas impactadas.

Sin embargo, voceros de prensa locales han señalado que varias regiones cercanas a los puntos bombardeados han registrado restricciones de acceso y cortes en las comunicaciones.

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