Nuevas grabaciones de cámaras revelan recorrido y participación de terceros en atentado a Miguel Uribe

La Fiscalía General de la Nación ha incorporado nuevo material probatorio en el proceso judicial que se adelanta por el atentado ocurrido el pasado 7 de junio contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, en el sector de Modelia, al occidente de Bogotá.

Las imágenes recientemente obtenidas provienen de cámaras de seguridad ubicadas en las cercanías del lugar donde se perpetró el ataque y muestran los movimientos del principal sospechoso, un menor de 15 años de edad, así como la posible intervención de varios cómplices.

Las grabaciones difundidas en las últimas horas evidencian que el menor investigado llegó al sector en una motocicleta, seguido de cerca por un automóvil de color negro en el que se transportaban dos personas.

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El vehículo y la motocicleta transitaron por una vía principal hasta detenerse en las inmediaciones del parque donde Miguel Uribe adelantaba un acto proselitista.

El menor descendió de la moto y caminó por al menos cuatro cuadras hasta llegar al lugar donde se encontraba el senador. Una vez allí, se acercó a la víctima y efectuó varios disparos.

El seguimiento de las cámaras permite establecer que el recorrido del atacante fue acompañado por al menos cinco individuos, quienes, según los investigadores, habrían participado de forma directa o indirecta en la ejecución del ataque.

Las imágenes muestran momentos clave que sustentan la hipótesis de un acto planeado, con la participación coordinada de varias personas. Tanto los ocupantes del vehículo como otros posibles partícipes ya habrían sido identificados por las autoridades, que ahora avanzan en la recolección de pruebas para emitir órdenes de captura.

El material audiovisual fue utilizado por la Fiscalía durante las audiencias preliminares de imputación de cargos contra el menor detenido.

La fiscal del caso, adscrita a la Unidad de Responsabilidad Penal para Adolescentes de la Seccional Bogotá, formuló imputación por los delitos de homicidio en grado de tentativa y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones. El joven no aceptó los cargos.

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La fiscal general de la Nación, Luz Adriana Camargo, indicó que el adolescente permanece bajo custodia en las instalaciones del búnker de la Fiscalía, bajo medidas especiales de protección.

Según explicó, la ubicación del menor en esta sede responde no solo a razones de seguridad, sino también a la posibilidad de que este acceda a un principio de oportunidad, figura contemplada por la legislación penal juvenil, que permite beneficios judiciales a cambio de colaboración efectiva con las autoridades.

Las imágenes, que dan cuenta de la cronología de los hechos antes del atentado, se han constituido en una prueba central dentro del proceso.

A partir de ellas, se ha determinado que el ataque no fue un acto aislado, sino una acción concertada, planificada y ejecutada con el apoyo logístico de varios individuos.

Las autoridades avanzan en la identificación de los demás involucrados, quienes podrían enfrentar cargos similares en caso de ser capturados.

En paralelo, la Fiscalía ha reiterado que el atentado está siendo abordado como un hecho de gravedad institucional, dadas las condiciones en las que se desarrolló: durante un evento público, en presencia de ciudadanos, y dirigido contra un congresista en ejercicio que ha manifestado su intención de aspirar a la Presidencia de la República.

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