Así funcionan las bodegas de clicks en el mundo: ubican sitio clave en donde se montan las tendencias

En un revelador viaje al corazón de Vietnam, el fotógrafo Jack Latham descorrió el velo sobre el enigmático mundo de las "granjas de clics", una industria que opera en la sombra para manipular la interacción digital. 

Durante un mes en la capital, Hanoi, Latham documentó estas operaciones clandestinas, que ofrecen servicios para inflar artificialmente la participación en plataformas de redes sociales, con el fin de distorsionar los algoritmos y la percepción pública.

En su reciente libro "Beggar's Honey", Latham presenta una perspectiva poco común de estos establecimientos, donde trabajadores mal remunerados se dedican a generar "me gusta", comentarios y compartidos en masa para clientes de todo el mundo. 

Esta práctica refleja una sed desmedida por la atención en el ecosistema de las redes sociales, donde la interacción se convierte en una moneda de cambio para anunciantes y mercadólogos.

Las granjas de clics, que han proliferado principalmente en Asia, representan una respuesta a la demanda creciente por perfiles digitales destacados en un mundo donde la visibilidad online se traduce en influencia y poder. 

A pesar de los intentos de regulación en algunos países, estas operaciones siguen floreciendo, aprovechando las condiciones económicas favorables en regiones de bajo costo laboral y energético.

Lea también (Gobierno argentino anula la subida de salarios para miembros del Ejecutivo)

Latham exploró diversos establecimientos en Vietnam, desde configuraciones tradicionales con cientos de dispositivos hasta sistemas más innovadores conocidos como "agricultura de cajas", donde múltiples teléfonos se controlan desde una única interfaz computacional. 

Estas granjas, algunas de ellas empresas familiares y otras asemejándose a startups tecnológicas, revelan una industria vasta y compleja.

Las imágenes capturadas por Latham exponen la monotonía y el aislamiento de los trabajadores en estas granjas, donde una sola persona puede manejar miles de interacciones, enfocándose en plataformas específicas como Facebook, YouTube o TikTok. 

A pesar de la cuestionable ética detrás de estas tareas, los trabajadores las ven como un empleo legítimo, ofreciendo "atajos" en un mundo digital saturado de competencia por la atención.

Además de su impacto en el comercio y la publicidad, las granjas de clics tienen un papel significativo en la política y la difusión de desinformación, amplificando mensajes y manipulando la opinión pública durante eventos críticos como elecciones. Latham, a través de su trabajo, busca arrojar luz sobre este fenómeno y sus implicaciones, destacando cómo la percepción digital puede estar distorsionada por estos mecanismos ocultos.

Finalmente, Latham planea exhibir una versión doméstica de una granja de clics en el Festival 2024 Images Vevey en Suiza, demostrando cómo estas prácticas pueden alterar drásticamente la percepción de popularidad y relevancia en las redes sociales. 

Su experiencia personal con una granja de clics, que incrementó exponencialmente la interacción en una publicación de su libro, sirve como un poderoso recordatorio de la necesidad de cuestionar y comprender los mecanismos detrás de lo que vemos en línea.

Otras noticias: