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Fuerzas Militares refuerzan estrategia integral para desarticular el narcotráfico
Colombia intensifica su lucha contra el narcotráfico con una estrategia militar conjunta que ya ha permitido incautar más de 2.000 toneladas de drogas desde 2022.

Las Fuerzas Militares intensifican su ofensiva contra el narcotráfico mediante una estrategia integral que articula acciones en los dominios terrestre, marítimo y aéreo. Esta iniciativa busca desarticular toda la cadena de valor del narcotráfico, principal fuente de financiación de Grupos Armados Organizados (GAO) y Grupos Armados Organizados Residuales (GAO-r) que operan en el país.
Desde agosto de 2022 a la fecha, las operaciones han permitido la incautación de más de 2.000 toneladas de estupefacientes, entre ellas cocaína, marihuana y 72 toneladas de pasta base de coca. Solo en 2023 se decomisaron cerca de 693 toneladas de alcaloides, mientras que en 2024 la cifra ascendió a más de 853 toneladas. En lo corrido de 2025 ya se han incautado 353 toneladas de drogas.
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La estrategia se ejecuta mediante operaciones conjuntas entre el Ejército Nacional, la Armada de Colombia y la Fuerza Aeroespacial Colombiana, con apoyo de la Fiscalía, la Policía Nacional y agencias de inteligencia nacionales e internacionales. Además, se destacan las operaciones combinadas con fuerzas de otros países y las acciones interagenciales, fundamentales para golpear redes criminales transnacionales.
En el terreno, el Ejército Nacional se enfoca en destruir laboratorios de procesamiento de drogas y en interceptar cargamentos en rutas clandestinas, especialmente en zonas remotas. La Armada de Colombia, por su parte, lidera las operaciones en aguas territoriales y de alta mar, donde emplea patrullajes constantes y tecnología avanzada para interceptar embarcaciones del narcotráfico.
La Fuerza Aeroespacial Colombiana vigila el espacio aéreo, detecta trazas sospechosas e intercepta aeronaves utilizadas para el transporte ilegal de drogas, incluso en regiones del Caribe y Centroamérica, gracias a la coordinación con países aliados.
Tres campañas estratégicas refuerzan esta labor: la Campaña Paya, liderada por el Ejército, ataca la primera fase del narcotráfico destruyendo laboratorios y frenando el tráfico de precursores químicos; la Campaña Naval Orión, a cargo de la Armada, involucra a múltiples países y ha logrado incautaciones históricas en el Caribe, Pacífico y Atlántico; y la Campaña Zeus, que permite a la Fuerza Aeroespacial detectar vuelos ilícitos y coordinar interdicciones aéreas a nivel regional.
El Comando General de las Fuerzas Militares y el Ministerio de Defensa mantienen un control estadístico riguroso de las operaciones, lo que permite evaluar en tiempo real los avances y ajustar las estrategias. Esta precisión también garantiza transparencia y eficiencia en el uso de recursos.
Gracias al fortalecimiento de la inteligencia militar y la cooperación internacional, Colombia ha ejecutado operaciones conjuntas que afectan directamente las estructuras financieras de las redes criminales y contribuyen a proteger la salud pública global.
Las Fuerzas Militares ratifican su compromiso de continuar actuando con contundencia, legalidad y respeto por el Derecho Internacional Humanitario, en defensa de la seguridad nacional y la paz en la región.
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