Habla propietaria de la cabaña ubicada en Punta Roca

Adriana Botero, propietaria de la cabaña ubicada en Punta Roca donde ocurrió la balacera el pasado 24 de octubre, entregó detalles sobre acuerdo con el contratista. 

“Antes que nada quiero aclarar qué el Mediterrané no es una casa de eventos. Mi esposo y yo compramos ese sitio hace varios años para realizar allí actividades de recreación y esparcimiento para personas en condición de discapacidad. Tenemos una fundación que se puede ver en Instagram, ‘@fundacionyotambien’, dedicada exclusivamente a este propósito".

La propietaria explicó que La fundación es sin ánimo de lucro y no cobran por participar en las actividades. Sin embargo, en ocasiones, alquilan el lugar para eventos privados con el fin de cubrir algunos gastos de mantenimiento del lugar.

"Esta vez, lo hice a una señora organizadora de eventos, quien ya había realizado un par de eventos más en el sitio, confié en el criterio de la organizadora de eventos”: dueña de Mediterrané.

La insistencia de la organizadora de eventos terminó de convencer a la propietaria de alquilar el lugar para un cumpleaños que contaría con un grupo de vallenato.

En principio le dije que no porque estaba haciendo unos arreglos en el kiosko; me dijo que no importaba porque era un cumpleaños y ellos querían hacer la fiesta a la orilla del lago con un grupo vallenato que habían contratado. De hecho, eso me pareció más simple pues en el lago no hay perturbación a los vecinos

Sin embargo, en ese momento lo único que le preocupaba a Botero que la música no se fuera a salir de tono y fueran muy altos los decibeles. 

Posteriormente, aclaró que “cuando yo alquilo el sitio, las personas firman un documento donde se comprometen a respetar unas normas. El punto 4 de este documento dice textualmente: El arrendatario y sus invitados deberán asumir una conducta apropiada que no altere el orden según el Código de Convivencia Ciudadana. Todo lo que ocurra dentro del predio durante el tiempo que este se encuentre alquilado será responsabilidad única y exclusiva del arrendatario y por tanto se eximirá de cualquier responsabilidad civil y/o penal al arrendador”.

La mujer señaló que esa fue una celebración convertida en tragedia y enfatizó que ella no conocía a las personas de esa fiesta. “Contraté con una señora organizadora de eventos y confié en su buen criterio y experiencia”, expuso.

Información tomada de entrevista con el Heraldo.

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