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Conductor ebrio arrolló a 11 personas en Bogotá: dos menores con muerte cerebral
Accidente en San Cristóbal cuando un taxi embistió a peatones.
En las últimas horas un fatal asunto marcó a los habitantes de localidad de San Cristóbal, en el suroriente de Bogotá. Esto tras un grave incidente vial que dejó un saldo de once personas heridas, entre ellas varios menores de edad.
Los hechos se registraron en el barrio La Sierra, cuando un vehículo de servicio público tipo taxi, identificado con placas VDW-626, perdió el control y arrolló a un grupo de peatones que transitaban por la zona.
Las autoridades confirmaron que el conductor del automóvil, un hombre de 56 años, fue capturado en flagrancia y se encontraba bajo los efectos del alcohol al momento del accidente.
La escena fue registrada por una cámara de seguridad ubicada en el sector. En el video, que ha circulado ampliamente por redes sociales y medios de comunicación, se observa cómo el taxi circula a alta velocidad, mientras varias personas, incluidas menores de edad, intentan cruzar una vía en una zona residencial.
El vehículo impacta directamente al grupo de peatones, algunos de los cuales salen expulsados varios metros.
Segundos después, el automóvil colisiona con una vivienda en cuya entrada peatonal había motocicletas estacionadas y otras personas reunidas.
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Entre las víctimas se encuentra un lactante de cuatro meses de edad, así como niños y adolescentes de siete, doce y quince años.
Las primeras versiones médicas indican que dos de ellos sufrieron trauma craneoencefálico severo y lesiones abdominales de alta complejidad, lo cual derivó en un diagnóstico de muerte cerebral.
Fueron trasladados de inmediato al hospital de La Victoria, donde se les brindó atención especializada.
El siniestro ha causado consternación entre los habitantes del sector, quienes acudieron en auxilio de las víctimas tras el hecho.
Los organismos de socorro realizaron el traslado de los heridos a centros asistenciales y la Policía de Tránsito ejecutó el protocolo para la detención del conductor, quien fue sometido a pruebas de alcoholemia y registrado como positivo.
La Fiscalía General de la Nación inició una investigación preliminar por el delito de lesiones personales agravadas, con posibilidad de que se reconfigure a homicidio en caso de confirmarse fallecimientos posteriores.
Este incidente se suma a una tendencia creciente de accidentalidad vial en la capital colombiana durante el año 2025.
De acuerdo con cifras de la plataforma Salud Data, 295 personas han perdido la vida en siniestros viales en Bogotá entre enero y la primera semana de noviembre.
De ese total, 147 casos corresponden a colisiones entre vehículos y 15 de ellos ocurrieron en la localidad de San Cristóbal.
Asimismo, al menos dos de los fallecimientos en esta zona de la ciudad han sido atribuidos a conductores que se encontraban bajo los efectos del alcohol.
Uno de los hechos más recientes que encendió las alarmas ocurrió el pasado 31 de octubre en el occidente de la ciudad.
Ese día, a las 6:45 de la mañana, se produjo un accidente en la avenida José Celestino Mutis, a la altura de la calle 63 con carrera 98, en el barrio Álamos.
El siniestro involucró un automóvil particular, tres motocicletas y un bus del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP). Como consecuencia, dos personas fallecieron.
En relación con ese hecho, el abogado Juan Manuel Castellanos Ovalle, quien representa a las familias de las víctimas, Viviana Marcela Suárez Isaza y su pareja sentimental, reveló que ya se logró establecer la plena identidad de los ocupantes del vehículo involucrado.
En su declaración, el abogado negó que el responsable del accidente hubiera actuado como conductor elegido.
Afirmó que, según el relato de testigos y material recolectado en la investigación, el presunto responsable —de nacionalidad extranjera— habría acompañado a la pareja en una jornada de consumo de licor dentro del bar Dejavú, en la localidad de Engativá, desde las 3:00 de la mañana, es decir, horas antes de que ocurriera el accidente.
Ahora el conductor tendrá que responder por su proceder y seguramente estará en prisión por lo menos veinte años.
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