A la cárcel segundo implicado por tortura y asesinato del adolescente Harold Aroca

La Fiscalía General de la Nación logró que un juez de control de garantías impusiera medida de aseguramiento en centro carcelario contra Haizak Karol Chara, presunto responsable de la tortura y asesinato del adolescente Harold Aroca, ocurrido en el barrio Los Laches, localidad de Santa Fe, en el centro de Bogotá. La decisión judicial representa el segundo avance relevante en el proceso, tras la captura previa de otro implicado.

De acuerdo con la investigación, el menor de 16 años fue interceptado en agosto por un grupo de hombres en un parque del sector. Según videos y otros elementos probatorios, los agresores cuestionaron al joven por supuestos señalamientos contra una organización criminal que opera en la zona. Luego fue trasladado a otro lugar, donde habría sido sometido a tratos crueles e inhumanos antes de ser atacado con arma de fuego.

El cuerpo de Aroca fue hallado el 9 de agosto en una zona boscosa. Su familia y las autoridades lo encontraron con quemaduras en varias partes del cuerpo y cuatro heridas por proyectil. La fiscal encargada detalló que la víctima presentaba hematomas en el cuello, rostro y manos, además de abrasiones compatibles con tortura y sofocación previas al homicidio. El examen médico legal estableció que la causa de muerte fue un trauma craneoencefálico severo acompañado de múltiples impactos.

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La captura de Chara se produjo en vía pública, como resultado de labores operativas de la Policía Nacional. El alcalde Carlos Fernando Galán confirmó el 22 de noviembre que uniformados del CAI Laches detuvieron a un hombre identificado como alias Chará, señalado como uno de los presuntos participantes en el crimen. El mandatario indicó que el detenido deberá responder por homicidio agravado, secuestro y tortura.

Durante la audiencia de imputación, una fiscal adscrita a la Unidad de Niños, Niñas y Adolescentes le atribuyó a Chara los delitos de homicidio y tortura agravada, secuestro simple y porte ilegal de armas de fuego, cargos que el procesado no aceptó. El ente acusador sostiene que los registros audiovisuales y los testimonios vinculan directamente al detenido con el grupo que retuvo y agredió al menor.

La medida de aseguramiento en centro carcelario tiene como propósito garantizar la comparecencia del acusado y proteger la integridad de testigos y comunidad. La Fiscalía continúa fortaleciendo la línea investigativa que apunta a la existencia de una estructura criminal en la zona, reiterando su compromiso con la defensa de los derechos de los adolescentes y la sanción de los delitos que vulneran su vida y dignidad.

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